Estoicismo y seducción.

En entrada se explica el porqué la escuela estoica puede resultar tremendamente útil tanto a la hora de ligar como de encarar proyectos vitales.

Bueno, entremos en materia…

En este blog recomiendo pelis, libros, vídeos, grupos de música, etc.

¿Me habéis hecho caso en alguno de ellos? De ser así, ¿qué os parecido?

Tengo curiosidad…

Va, dejadme un comentario y decídmelo que no os cuesta nada y a mí me hacéis feliz, cabrones.

Llevo unos días acordándome de Argentina.

Es un país que visité hace años y me encantó.

Joder, el culo de las argentinas debería tener templos en su honor para hacerle ofrendas.

Actualmente dicho país está atravesando una crisis muy jodida de la que poco se dice en la tele.

Lo gracioso es que los propios argentinos se ríen del tema y te preguntan cuándo su país no ha estado en crisis.

Lo de Argentina es un círculo vicioso que no tiene arreglo a menos que cambie completamente de modelo socioeconómico.

Pero esto no va a suceder porque despertaría un terrible caos social, con revueltas violentas y demás, y porque muchos de los que tendrían que llevar a cabo dicha transformación perderían sus privilegios.

Es similar a lo que sucede en España, pero muchísimo más bestia.

Sin embargo, Argentina llegó a ser uno de los países más poderosos del planeta.

Al igual que Estados Unidos, era un territorio poco habitado que recibió un montón de inmigrantes españoles, italianos, alemanes y demás que no tenían billete de vuelta.

Era un: ‘o haces algo con tu vida en este nuevo mundo o te mueres’.

Y es así como un grupo de expatriados mugrientos convirtieron esta tierra en una de las más prósperas del planeta.

¿Qué sucedió?

Resumiendo horrores, el país generaba tanto dinero que desde el gobierno se empezó a repartir con causas y servicios sociales.

Si bien las primeras olas de inmigrantes estaban llenas de rabia y ganas de trabajar y salir adelante, sus descendientes paulatinamente se fueron acomodando y confiando en la ‘hucha infinita’ que les daba tan grata calidad de vida.

Pero la hucha se vació y en vez de volverla a llenar, lo que hicieron fue contraer deuda… y más deuda… y más deuda…

Y así siguen desde entonces intentando mantener un sistema que claramente ni se sostiene ni funciona.

Sin embargo, en Estados Unidos incluso hoy en día todavía se conserva el espíritu de aquellos hombres y mujeres que lo dieron todo para construirse una existencia digna.

Por este motivo ellos todavía no se han dado, a diferencia de Argentina, una hostia tan grande. Y si se la han dado, han sabido recuperarse.

Ellos siguen creyendo que tú y solo tú eres quien tiene que sacarse las castañas del fuego.

Si triunfas es porque te lo mereces.

Si fracasas es porque tú te lo has buscado. O bien te has rendido demasiado pronto o bien no has luchado lo suficiente o bien no has apreciado tus opciones.

De todo esto va un poco la entrada de hoy.

Cuando sueltas la palabra estoico por la calle automáticamente la mayor parte de la gente cree que se trata de peña que reprime sus emociones ante la vida.

En plan: ‘estoy viendo una gorda desnuda horrorosa con granos en la cara, indescriptibles puntitos blancos en la peluca de su entrepierna y un rostro similar al del blobfish, pero no tengo ganas de vomitar porque, eh, yo controlo, colega’.

O ‘me da igual que me tortures atándome a una silla con un televisor en frente en el que solo se emiten películas españolas. Te aseguro que no me vas a provocar vergüenza ajena ni ganas de suicidarme’.

NO.

El estoicismo no es eso.

A partir de ahora voy a hablar sobre el tema en términos generales para lo que nos interesa.

Lo digo con intención de que no me venga un típico doctor en filosofía esperando aquí una disertación profesional sobre esta escuela acompañada de maravillosas anotaciones históricas.

Tened en cuenta que este blog va principalmente sobre follar.

Joder.

Para empezar, el estoicismo era una corriente filosófica que buscaba una aplicación práctica en la realidad.

A los estoicos les molestaban los filósofos que se rallaban mucho la cabeza y a la hora de la verdad no hacían nada con ello.

Podemos entrar en que los mismos estoicos también cayeron en esto muchas veces, pero ya he dicho que no voy a hacer anotaciones históricas.

Joder.

Sobre esta idea gira gran parte de su ideario.

Es decir, para los estoicos es mejor que te centres en aquellos ámbitos en los que tienes capacidad de acción y que dejes en un segundo plano o incluso te olvides de aquellos en los que no.

Para entendernos con un ejemplo cutre, tú por ejemplo tienes poder sobre qué vídeo vas a ver en tu próxima paja, pero no lo tienes en cuanto a la organización territorial de tu país.

Un estoico te diría que invirtieses tus esfuerzos en elegir correctamente tu vídeo, pues no es lo mismo una milf haciendo squirt que una amateur teen con su primer anal, y que pasases de si los catalanes se sienten españoles o murcianos.

Esto creo que es muy positivo para la seducción y de hecho es una de las ideas que intento transmitir desde los albores de este blog: CENTRAOS EN AQUELLO SOBRE LO QUE TENÉIS INFLUENCIA.

Tú no puedes conseguir que Martita se frote el clítoris por la noche pensando en ti porque le has aplicado las ridículas técnicas de chamán-paleolítico-coach-alfa-superhombre que vas a leer por ahí.

No tienes el menor control sobre cómo ella siente o piensa.

Y si crees que realmente lo tienes, ya te digo yo que no es más que una ilusión.

A los tíos nos gusta pensar que todas nuestras acciones trastocan a los demás. Especialmente a las tías.

Esa indirecta cargada de contenido sexual que le has dicho esta mañana a Martita con la que crees que va a estar todo el día goteando flujo vaginal, en realidad no solo la ha dejado indiferente, sino que además se ha olvidado de ella a los cinco minutos.

Por tanto, desde un punto de vista estoico el que llegues a tu casa trazando complicadísimos planes para ligarte a esta o aquella o que te pases cinco horas dilucidando si lo que has dicho o hecho a la tía que te la pone pedregosa ha sido correcto, es una completa pérdida de tiempo.

Y, en efecto, lo es.

Un estoico te diría que te centres en las cosas que SÍ dependen de ti para atraer a las mujeres.

Por ejemplo, cuidar tu peinado, tu ropa, ir al gimnasio, no tener la dentadura en plan británico…

Ufff, sobre esto tengo varias historias de la cripta.

Cuando vivía en Reino Unido a veces me ligaba a una que físicamente estaba buena. Pero luego veía sus dientes destartalados y me daba un poco de grima pasar mi lengua cerca de ellos…

En Reino Unido puedes ver los dientes más locos de Europa. En serio jo jo jo.

También las tías más feas de la Tierra jo jo jo.

Volviendo al tema, que se me va la puta cabeza, lo suyo es que invirtáis en aquello sobre lo que tenéis control.

Sois los putos dueños de vuestra imagen.

Incluso en los ambientes donde igual tengáis unos límites, como pueda ser un trabajo con código de vestimenta, podéis esforzaros para lucir bien dentro de ellos.

¿Y qué sucede a nivel social? ¿Tenemos que hacer lo que nos sale de la punta de la polla porque, al final, no podemos medir las reacciones ajenas?

No, tampoco eso…

A medida que tu círculo social se amplia y vas conociendo gente de todo tipo y condición, también de alguna manera aprendes a relacionarte con ella.

Me explico.

Tú no tienes ni puta idea de lo que te dirá un desconocido si le pides que te compre una Piña Colada por la cara, pero puedes prever que te va a mandar a la mierda.

Es decir, TÚ ERES EL RESPONSABLE de lo que dices o de lo que no.

Ahí volvemos a la idea de que en este sentido tú eres tu propio dueño y puedes trabajártelo.

Cuando sales a ligar, especialmente de celebración, pronto descubres que las tías están en modo festivo y que quieren divertirse.

Si te pones en plan serio comentándoles que el Universo puede tener varias dimensiones y que pensar en la materia y energía oscuras te pone tenso, la probabilidad de que te den la espalda es bastante alta.

Sabiendo esto, tú puedes decidir entrarles diciendo tonterías y con una sonrisa de oreja a oreja o con rostro de haber estado violando cangrejos en la ría.

Dependiendo de tu decisión ellas reaccionarán de un modo u otro.

También es cierto que en ocasiones si no les entras por la vista, hagas lo que hagas te van a mandar a hacer dibujitos de Peppa Pig en cartulinas de colores; lo cual potencia la idea estoica de que al final esto no debería importarte pues no tienes potestad sobre ello.

Puedes entrenarte para ser un tío más sociable y para hacer unas predicciones más acertadas.

Esto es último es muy cierto.

Recuerdo en ciertas quedadas de supuestos seductores que algunos frikis tras entrar a una tía y que ésta les hiciese algo de caso, le pedían el teléfono y hasta alguno intentaba besarla.

Obviamente las pavas se quedaban locas y hasta metían la mano en el bolso buscando el espray pimienta.

Si decides potenciar tus habilidades sociales seguirás nadando en la incertidumbre, pero por ejemplo podrás pulir mierdas como la timidez o el no comportarte como un psycho espanta-chochitos humeantes.

¿Y para qué más sirve el estoicismo en la seducción?

Pues, por ejemplo, para hacer de tu vida algo que resulte atractivo a las señoritas.

O lo más importante: una con la que sientas a gusto y realizado.

Típico mensaje que me mandáis: ‘es que yo tengo la carrera de comunicación audiovisual y no encuentro trabajo de nada y me toca estar en casa de mis padres y no puedo viajar porque no tengo dinero ni salir mucho y blablabla’.

Vamos a ver, tú no puedes hacer que la economía española cambie. Lo que sí puedes hacer es cambiar tu propia economía.

Esto sí es estoico.

¿Cómo?

Es tan fácil como sacarte un módulo de grado medio o grado superior de informática para justificar un titulito de los cojones.

Una vez lo termines, haces un curso de SAP.

Vas a tener trabajo de sobra.

En cinco años de experiencia, a poco que seas medio bueno, vas a ganar más que peña con dos másteres y cinco carreras.

Lo de viajar es todavía más fácil.

Te sacas un curso de cocinero y ya está.

En Europa es una profesión muy demandada que te permite vivir en otros países.

Y fuera del continente hay un montón de restaurantes que también estarían dispuestos a contratarte si ven que estás medio espabilado.

Y así con todo.

Joder.

Si tú no tienes dominio sobre tu vida, ¿quién cojones lo tiene?

A mí los estoicos me hicieron darme cuenta de esto a temprana edad.

Tras leerlos, llegué a la conclusión de que la gente de mi pueblo junto con su modo de vida y pensamientos no iban a cambiar.

No podía hacer una mierda al respecto.

En cambio, yo sí tenía margen de maniobra. Podía largarme a la aventura.

Hoy en día, yo siempre tengo como un radar mental que me indica aquello que está en mis manos y aquello que no.

Intento gastar casi toda mi energía en lo primero y no obsesionarme con lo segundo.

Es por este motivo que el humor es fundamental en mi vida.

Por ejemplo, la política no me la tomo muy en serio porque, a fin de cuentas, por muchos sofocos que pille por ella al final está conformada por personas que ni me conocen.

Lo mismo me pasa con ciertos asuntos delicados.

Por ejemplo, cuando estaba en mi primera carrera recuerdo que se hizo, atención, una manifestación en contra de la pobreza.

Así, en general.

Me parecía grotesco que un grupo de personas bastante amplio hiciese una protesta tan ‘abstracta’.

Y lo que es peor: que no ofreciese soluciones más allá de las manidas demagogias de turno.

Lo más triste es que encima opinaba que su motivación era puramente egoísta.

Vamos, que en el fondo la pobreza les importaba una mierda y estaban ahí para sentirse mejor consigo mismos.

Un estoico les diría: ‘déjate de pollas de ir con pintas de Manu Chao y perder el tiempo con problemas que ni comprendes ni puedes resolver y cúrratelo con lo que tienes a tu alcance.

Por ejemplo, puedes ir a una asociación de tu barrio, de las que reparten comida y asilo, y pasar tiempo con sus asistentes. Puedes hablar con ellos para comprenderlos y ofrecerles soluciones o incluso ayudarles a que encuentren un trabajo o lo que sea.

Esto sí lo puedes hacer y va a ser más útil, joder. Con suerte y esfuerzo, puede que hasta tengas algún que otro buen resultado’.

Esto es aplicable a cualquier ámbito de la vida cotidiana.

Joder.

Debéis sopesar qué opciones REALISTAS tenéis y qué opciones no son más que fantasías o ilusiones improbables.

De ahí que el conocerse a uno mismo y saber de dónde parte sea tan importante.

Nadie ha dicho que sea fácil ni agradable. Pero es lo que hay.

A nivel profesional un tipo de un pueblo de Extremadura de papás agricultores no va a tener las mismas posibilidades de encontrar un trabajo bien remunerado que el hijo de un famoso político de Madrid.

Deberá luchar muchísimo más y estar más cerca del suelo que el otro para conseguir lo mismo.

Pero al final y a larga, quienes adoptan esta actitud y esta manera de ver las cosas acaban consiguiendo sus objetivos.

En ocasiones, incluso alcanzan cuotas más altas que aquellos que en principio habían sido bendecidos con una posición de ventaja.

Dejad que os invada el mismo espíritu que tuvieron todas aquellas personas que quisieron darse una nueva oportunidad en Argentina.

Joder.

Por cierto, los estoicos más famosos son Zenón de Citio, Séneca, Epicteto y Marco Aurelio, aunque hay muchos más.

Tenéis un montón de ediciones comentadas de estos clásicos a precios de risa, con lo cual a quien le pique la curiosidad no tiene excusa.

Felices polvos, cabrones.